La cuarta etapa del Tour de Francia deparó una lucha sin cuartel entre los grandes favoritos a la clasificación general. El esloveno Tadej Pogacar atacó en el último tramo de la subida al Galibier tras un magnífico trabajo de sus compañeros del UAE y consiguió unos metros de ventaja sobre Jonas Vingegaard que consiguió ampliar en la larguísima bajada.
El primer asalto de un mano a mano que está llamado a repetirse a lo largo de toda la ronda gala. La subida al duro Col de Galibier se hizo a un ritmo infernal. Los ciclistas van al límite del esfuerzo y desde la organización como desde el propio colectivo ciclista siempre se insiste en la importancia de no acercarse demasiado y mucho menos tocar a los protagonistas del Tour. Los aficionados deben permanecer en los márgenes de la carretera para así facilitar la labor de los ciclistas. Unas indicaciones de puro sentido común que la gran mayoría de aficionados que acude a ver la carrera respeta, pero que unos pocos siguen sin entender.
En las últimas horas se ha hecho viral un vídeo grabado en el Galibier al paso del grupo de favoritos. En el vídeo se observa a un aficionado que empieza a correr al lado de los ciclistas e impacta con otro que está animando a los corredores. Éste último se quita de encima al primer aficionado, que acaba ladera abajo, sin aparentes consecuencias graves para su integridad física. Un vídeo muy celebrado en las redes sociales por la mayoría de aficionados del ciclismo que están hartos de la actitud irresponsable de unos pocos.