ALARMA ENTRE LOS GANADEROS DE ANSó POR CINCO ATAQUES DE OSO EN MENOS DE UN MES

Los ganaderos que suben a pastar a sus ovejas a los montes del término municipal de Ansó están alarmados por la sucesión de ataques de oso que ha sufrido su ganado en las últimas semanas. El departamento de Medio Ambiente y Turismo ha confirmado hasta cinco embestidas en esta zona del Pirineo sucedidos los días 5, 14, 18, 27 y 28 de junio.

Los técnicos de la Dirección General de Medio Natural han cuantificado el número de bajas en cinco ovejas muertas (una en cada ataque), aunque los ganaderos afectados elevan la cifra por encima de la veintena de cabezas y añaden una acometida más hasta seis.

"Desde que hemos subido las ovejas al monte para aprovechar la mejor época del pasto, los ataques están siendo una constante. Es una salvajada y al final vamos a desaparecer por un capricho ya que el oso es una especie extinguida en el Pirineo y se han empeñado en traerlos de Eslovenia; y mientras, nadie se responsabilidad de eso porque somos los únicos paganos", denuncian los ganaderos de Ansó.

Según fuentes del departamento de Medio Ambiente, por ahora los afectados no han formalizado la solicitud de ayudas, aunque desde la Dirección General de Medio Natural han mantenido contactos con ellos.

Se desconoce la autoría de estos ataques, aunque recientemente Agentes de Protección de la Naturaleza (APN) avistaron un oso el Parque Natural de los Valles Occidentales -que engloba los municipios de Aísa, Ansó, Aragüés del Puerto, Borau, Jasa, Valle de Echo y Canal de Berdún- mientras realizaban el seguimiento de una planta endémica a gran altura. Además, la presencia de la nieve facilitó que encontraran incluso las huellas marcadas en el manto.

Además, el departamento de Medio Ambiente ha contabilizado esta primavera observaciones de cinco ejemplares en los valles de Hecho y Ansó de una hembra y dos machos subadultos que podrían corresponder con la osa Claverina y con Larru y Bious, hijos de otra hembra que vive en el lado francés; y de otros dos ejemplares en Laspaúles (Ribagorza) y Sallent (Alto Gállego). Aquí dos vecinos pudieron grabar al animal en mayo, pero no se le ha vuelto a ver desde hace un mes.

El último informe de la Red Oso Pardo del año 2023 -integrada por Francia, Andorra, Aragón, Navarra y Cataluña- cifró en seis los ejemplares presentes en el Pirineo aragonés tras recoger 82 indicios de su presencia entre huellas (6), vello (22), foto y vídeos automáticos (42), excrementos (1), observaciones visuales (3) y otras pistas (3). Los ataques a ganado doméstico bajaron notablemente, pasando de 11 a solo cinco.

Además, estos expertos dieron por muerto a Goiat, el oso más temido de los últimos años por sus numerosos ataques a ganado en las comarcas de Sobrarbe y Ribagorza, al no haber detectado ningún indicio de su presencia en España ni en Francia desde el 25 de abril de 2022, pocos días después de atacar a un rebaño en Gistaín. "Un macho adulto como él, normalmente muy activo, difícilmente puede pasar desaparecido durante más de un año", concluyeron. Y es que para que se considere muerto, tienen que pasar más de dos años sin saber nada de él.

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